1. Basado en la estructura y complejidad de la tarea:
* Configuración de objetivos: Definición de objetivos claros, medibles, alcanzables, relevantes y vinculados en el tiempo (inteligente). Esto es fundamental para cualquier tarea.
* descomposición de la tarea: Desglosar tareas grandes y complejas en subtarsas más pequeñas y más manejables. Esto mejora la eficiencia y permite un mejor monitoreo del progreso.
* Secuenciación/Programación: Determinar el orden en el que se deben realizar sub-tareas y asignar tiempo para su finalización. Esto a menudo implica priorizar las tareas basadas en la urgencia y la importancia.
* Asignación de recursos: Identificar y asignar los recursos necesarios (personas, materiales, equipos, presupuesto, información) a cada subasta.
* Ejecución/implementación: Llevando a cabo las subtarsas de acuerdo con el plan. Esto implica acción individual y colaboración en equipo.
* Monitoreo y control: Seguimiento del progreso, identificando las desviaciones del plan y haciendo los ajustes necesarios. Esto incluye recopilar datos, analizar el rendimiento y tomar acciones correctivas.
* Evaluación: Evaluar el éxito general de la tarea para lograr sus objetivos. Esto incluye analizar los resultados, aprender de los errores e identificar áreas para la mejora.
2. Basado en las áreas funcionales involucradas:
Esta perspectiva depende en gran medida de la estructura de la organización y el tipo de tarea. Los ejemplos pueden incluir:
* Planificación: Planificación estratégica, táctica y operativa relacionada con la tarea.
* Marketing y ventas: Promover los resultados de la tarea o asegurar los recursos necesarios.
* Operaciones: Ejecutando los procesos centrales de la tarea.
* Finanzas: Gestionar el presupuesto, el seguimiento de los gastos y garantizar la rentabilidad.
* Recursos humanos: Reclutar, capacitar y administrar el personal involucrado en la tarea.
* Tecnología: Utilizando la tecnología para apoyar la ejecución de la tarea.
3. Basado en el marco de gestión de proyectos (si corresponde):
Si la tarea organizacional es un proyecto, entonces los componentes comunes pueden incluir:
* Iniciación: Definir el proyecto, describir los objetivos y asegurar las aprobaciones.
* Planificación: Desarrollar un plan de proyecto detallado que incluye alcance, cronograma, presupuesto y recursos.
* Ejecución: Llevando a cabo el plan del proyecto.
* Monitoreo y control: Seguimiento del progreso, gestión de riesgos y realización de ajustes según sea necesario.
* Cierre: Completar el proyecto, documentar las lecciones aprendidas y celebrar los éxitos.
No importa la perspectiva, las tareas organizativas exitosas requieren una comunicación clara, colaboración y responsabilidad entre todas las partes involucradas. Los componentes específicos y su énfasis variarán según la naturaleza de la organización y la tarea misma.