* Propiedad: ¿Quién es realmente dueño de la computadora? Si la computadora es propiedad del empleador, la esposa no tiene un reclamo legal. El empleador probablemente exigiría su rendimiento. Si el esposo lo poseía personalmente antes del matrimonio, probablemente se considere su propiedad separada y conserva la propiedad. Si se compró durante el matrimonio, podría considerarse propiedad matrimonial, sujeto a la división en el divorcio.
* Leyes de propiedad marital: Cada estado (en los Estados Unidos) o jurisdicción (en otro lugar) tiene diferentes leyes con respecto a la propiedad matrimonial. Algunos son estados de "propiedad comunitaria", donde los activos adquiridos durante el matrimonio están igualmente divididos. Otros son estados de "distribución equitativa", donde los activos se dividen de manera justa, pero no necesariamente igualmente. Un juez determinaría si la computadora es propiedad marital y cómo debe distribuirse.
* use: ¿Se usó la computadora principalmente para el trabajo o el uso personal? Si se usó principalmente para el trabajo, es más probable que el tribunal gobierne a favor del empleador o esposo retenga la posesión. Si se usó significativamente para uso personal (por ejemplo, almacenar fotos familiares, documentos personales), esto podría influir en la decisión.
* Acuerdo de divorcio: Un acuerdo o un acuerdo de divorcio puede dictar quién obtiene la computadora. Si la pareja está de acuerdo en su disposición, el tribunal generalmente honrará ese acuerdo.
* Política del empleador: Es probable que el empleador tenga políticas con respecto a la propiedad de la empresa y puede exigir la devolución de la computadora, independientemente de los procedimientos de divorcio. No devolver la propiedad de la compañía puede tener graves consecuencias legales tanto para el esposo como para la esposa potencialmente si ella la posee.
En resumen, es poco probable que la esposa mantenga legalmente una computadora de trabajo propiedad del empleador del esposo. Si la computadora se considera propiedad matrimonial, su distribución está sujeta a procedimientos legales y la decisión del juez. Es crucial consultar con un abogado especializado en derecho de familia para determinar el curso de acción adecuado.