Las características clave del software interno incluyen:
* Custom-construido: Se adapta a las necesidades y flujos de trabajo específicos de la empresa, abordando desafíos y oportunidades únicos.
* Equipo de desarrollo interno: La compañía emplea a sus propios programadores, diseñadores y otros especialistas para crear y mantener el software.
* Inversión inicial más alta: El costo inicial del desarrollo puede ser significativamente mayor que la compra del software OTS.
* Mayor control y flexibilidad: La compañía tiene un control completo sobre las características, actualizaciones y seguridad del software.
* Potencial para ahorros de costos a largo plazo: Si bien los costos iniciales son altos, el software interno bien diseñado puede conducir a ahorros de costos a largo plazo a largo plazo a través de una mayor eficiencia y evitación de tarifas de licencia.
* Dependencia de la experiencia interna: La compañía depende de las habilidades y disponibilidad de su propio equipo para mantenimiento, actualizaciones y correcciones de errores.
Los ejemplos de software interno pueden incluir:
* Un sistema CRM personalizado diseñado para administrar las relaciones con los clientes específicamente para una industria en particular.
* Un sistema de gestión de inventario patentado optimizado para la cadena de suministro única de una empresa.
* Una plataforma de comunicación interna creada para una mejor colaboración entre los empleados.
* Una herramienta de análisis de datos a medida adaptada a los requisitos de informes específicos de la Compañía.
En resumen, el software interno representa una inversión significativa, pero ofrece un alto grado de personalización y control, lo que lo convierte en una opción viable para empresas con necesidades específicas, complejas o sensibles que no se pueden satisfacer con un software fácilmente disponible.