Una hoja de trabajo (como en Excel o Google Sheets) es un archivo único y plano. Una base de datos, por otro lado, es un conjunto estructurado de datos organizados para almacenamiento, recuperación, modificación y eliminación eficientes. Por lo general, consta de múltiples tablas (no hojas de trabajo), que están relacionadas entre sí a través de claves, y emplea un sistema de gestión de bases de datos (DBMS) para administrar los datos. Las bases de datos ofrecen características como restricciones de integridad de datos, indexación para búsquedas rápidas y control de concurrencia para múltiples usuarios que acceden a los datos simultáneamente, características que generalmente carecen de hojas de trabajo.