He aquí por qué:
* iterativo e incremental: Este enfoque permite el desarrollo del editor de texto en iteraciones pequeñas y manejables. Cada iteración produce una versión de trabajo del software con un subconjunto de las características planificadas. Esto permite la retroalimentación temprana, la adaptación más rápida a los requisitos cambiantes (por ejemplo, comentarios de los usuarios que sugieren una nueva característica o un cambio en el diseño) y un riesgo reducido de fallas a gran escala. Un editor de texto simple puede comenzar con características básicas como abrir, guardar y editar texto, luego agregar de forma incremental como resaltar sintaxis, buscar/reemplazar, corrector ortográfico, etc.
* Agile (scrum o kanban): Las metodologías ágiles se ajustan perfectamente al desarrollo iterativo e incremental. Scrum proporciona un marco estructurado con sprints (iteraciones cortas), soportes diarios y revisiones de sprint, facilitando la colaboración y la mejora continua. Kanban ofrece un enfoque más flexible, centrándose en visualizar el flujo de trabajo y limitar el trabajo en progreso. Ambos funcionarían bien para un proyecto de editor de texto, dependiendo del tamaño y la preferencia del equipo.
Mientras que otros modelos * podrían * técnicamente usarse (por ejemplo, cascada), son menos adecuados:
* cascada: La cascada es demasiado rígida para un proyecto donde los requisitos pueden evolucionar durante el desarrollo. Es más adecuado para proyectos con requisitos muy estables y bien definidos por adelantado, lo que es menos probable para un software tan flexible como un editor de texto.
En resumen, la flexibilidad y la naturaleza iterativa de los métodos ágiles, basados en principios de desarrollo iterativos e incrementales, los convierten en la opción más efectiva para construir un nuevo editor de texto.