He aquí por qué:
* La autorización es clave: La legalidad depende de si tiene consentimiento explícito. El permiso transforma un acto potencialmente criminal en una actividad legítima.
* Propósito y alcance: Es importante que el permiso describe claramente el alcance de sus actividades. Por ejemplo, es posible que tenga permiso para probar la fuerza de la contraseña, pero no para acceder o alterar mensajes personales.
* Acuerdo escrito (muy recomendable): Idealmente, debe tener un acuerdo por escrito que detalla el permiso otorgado, el alcance de las pruebas y cualquier limitación. Esto protege tanto a usted como al propietario de la cuenta.
Sin embargo, incluso con permiso, tenga en cuenta lo siguiente:
* Términos de servicio de Instagram: Si bien tiene el permiso del propietario de la cuenta, sus acciones aún pueden violar los términos de servicio de Instagram. Instagram podría marcar o suspender la cuenta si detecta actividad inusual.
* Las mejores prácticas: Use técnicas de piratería ética y evite causar daños a la cuenta o sus datos.
* Transparencia: Mantenga informado al propietario de la cuenta durante todo el proceso.
En resumen:
Tener permiso es esencial para legalizar dicha actividad. Sin ella, podría enfrentar graves consecuencias legales. Siempre priorice la comunicación clara, la documentación y las prácticas de piratería ética.