1. Cálculos manuales: La gente realizaba operaciones matemáticas, como suma, resta, multiplicación y división, utilizando lápices, calculadoras o máquinas sumadoras mecánicas.
2. Hojas de cálculo en papel: Los cálculos se organizaron en filas y columnas en papel, creando un formato rudimentario similar a una hoja de cálculo. Estas hojas de cálculo en papel se utilizaron para registrar y organizar datos, realizar cálculos y generar informes.
3. Computadoras centrales: En organizaciones más grandes, se utilizaban computadoras centrales con lenguajes de programación especializados para realizar cálculos complejos. Sin embargo, estos sistemas generalmente sólo eran accesibles para un grupo selecto de personas capacitadas.
4. Software estadístico: Antes de Excel existía software especializado para análisis estadístico y manipulación de datos. Estos programas, a menudo basados en línea de comandos, requerían conocimientos de programación y eran utilizados por investigadores, analistas y estadísticos.
5. Herramientas gráficas: Los programas para crear gráficos y tablas estaban disponibles antes que Excel, pero a menudo eran complejos de usar y requerían conocimientos de programación o sintaxis especializada.
6. Complementos de hoja de cálculo: Antes de Excel, algunas aplicaciones de procesamiento de textos y bases de datos ofrecían capacidades rudimentarias de hojas de cálculo como complementos o módulos. Estos complementos proporcionaron funciones limitadas en comparación con hojas de cálculo posteriores como Excel.
Vale la pena señalar que la introducción de Excel en 1985 revolucionó la forma en que se realizaban el análisis y los cálculos de datos, convirtiéndose en una herramienta omnipresente para una amplia gama de profesionales de todas las industrias. Excel combinó la facilidad de uso de las hojas de cálculo en papel con capacidades avanzadas de cálculo y gráficos, haciéndolo accesible a un público más amplio.