Este enfoque ofrece varias ventajas clave:
* Facilidad de implementación: Un solo archivo se puede implementar fácilmente en varias plataformas de virtualización (VMware vSphere, Microsoft Hyper-V, etc.) con una configuración mínima.
* Entorno consistente: Asegura que la aplicación se ejecute consistentemente en diferentes entornos, minimizando las inconsistencias de implementación.
* Gestión simplificada: La gestión centralizada de la aplicación y su infraestructura subyacente es más fácil.
* Portabilidad mejorada: Los dispositivos virtuales se pueden mover fácilmente entre diferentes centros de datos o proveedores de nubes.
* Complejidad reducida: Abraza gran parte de la complejidad de infraestructura subyacente, lo que facilita que los usuarios no técnicos utilicen aplicaciones.
En resumen, los electrodomésticos virtuales tienen como objetivo proporcionar una solución preparada y empaquetada para el software, simplificando así la implementación y el ciclo de vida operativo.