Beneficios:
* movilidad: Esta es la mayor ventaja. Los usuarios pueden conectarse a la red desde cualquier lugar dentro del rango del punto de acceso inalámbrico (WAP), sin la necesidad de cables físicos. Esto es crucial para computadoras portátiles, tabletas y teléfonos inteligentes.
* Facilidad de instalación y configuración: Configurar una red inalámbrica básica es generalmente mucho más simple que ejecutar cables en un edificio. Esto reduce el tiempo de instalación y el costo.
* Flexibilidad y escalabilidad: Agregar nuevos dispositivos a una red inalámbrica suele ser sencillo. Expandir el alcance de la red se puede hacer agregando más WAP.
* rentable (en algunos casos): Si bien los costos iniciales del equipo pueden ser similares, la ausencia de cableado puede reducir significativamente el costo general de la instalación, especialmente en espacios o áreas más grandes donde el cableado es difícil.
* Estética: La falta de cables visibles puede mejorar la estética de una casa u oficina.
Downfalls:
* Riesgos de seguridad: Las redes inalámbricas son más vulnerables a las violaciones de seguridad que las redes con cable. El acceso no autorizado es más fácil, lo que requiere contraseñas seguras y protocolos potencialmente de cifrado como WPA3.
* velocidades más lentas (potencialmente): Las señales inalámbricas son susceptibles a la interferencia de otros dispositivos y obstáculos físicos (paredes, muebles). Esto puede conducir a velocidades más lentas en comparación con las conexiones con cable, especialmente en áreas congestionadas o con estándares inalámbricos más antiguos.
* Rango limitado: El rango de una red inalámbrica está limitada por el poder del WAP y el entorno circundante. La fuerza de la señal se debilita con la distancia y los obstáculos.
* Interferencia: Las señales inalámbricas pueden interferir con otros dispositivos que operan con la misma frecuencia (microondas, dispositivos Bluetooth, teléfonos inalámbricos). Esto puede conducir a conexiones caídas y velocidad reducida.
* Variabilidad de la intensidad de la señal: La intensidad de la señal puede fluctuar dependiendo de la ubicación, la hora del día y los factores ambientales. Esto puede conducir a un rendimiento inconsistente.
* Dependencia de la potencia: Las redes inalámbricas requieren energía para operar, a diferencia de las redes con cable que pueden funcionar con un corte de energía si se usa un UPS.
* Mayor costo en algunos casos: Si bien la instalación puede ser más barato, el equipo inalámbrico de alta gama (enrutadores, puntos de acceso con características avanzadas) puede ser más costoso que el equipo básico de redes con cable.
* Mantenimiento: Si bien es más simple para configurar inicialmente, mantener un rendimiento óptimo puede requerir una resolución de problemas ocasional y ajuste de la configuración.
En última instancia, la mejor opción entre redes cableadas e inalámbricas depende de las necesidades y prioridades individuales. Muchos usuarios optan por un enfoque híbrido, combinando las fortalezas de ambos.