Aquí hay un desglose de sus funciones clave:
* Gestión centralizada: El controlador permite a los administradores configurar, monitorear y solucionar problemas de todos los AP desde una sola interfaz. Esto simplifica las implementaciones, especialmente en grandes redes con muchos puntos de acceso.
* Configuración simplificada: En lugar de configurar cada AP manualmente, el controlador empuja las configuraciones a todos los AP administrados. Esto garantiza la consistencia y reduce el tiempo requerido para la configuración inicial y el mantenimiento continuo.
* Seguridad mejorada: El controlador proporciona políticas de seguridad centralizadas, incluidos el cifrado, la autenticación y las listas de control de acceso (ACL), que pueden aplicarse a todos los AP simultáneamente. Esto mejora la seguridad de la red y simplifica la aplicación de políticas.
* Radio Resource Management (RRM): Muchos controladores incluyen características para optimizar el uso de radiofrecuencia (RF). Esto ayuda a prevenir la interferencia, mejorar la cobertura y maximizar el rendimiento ajustando automáticamente los canales y los niveles de potencia del APS.
* roaming: Los controladores WLAN facilitan el roaming sin problemas entre los AP, permitiendo a los usuarios moverse libremente dentro de una red sin experimentar interrupciones en su conexión.
* Monitoreo y solución de problemas: Los controladores proporcionan capacidades integrales de monitoreo, lo que permite a los administradores rastrear el rendimiento AP, la conectividad del cliente y la interferencia de RF. Esto facilita la resolución de problemas más rápida y la resolución de problemas proactivos.
* escalabilidad: Los controladores pueden administrar una gran cantidad de AP, haciéndolos ideales para grandes empresas, campus o implementaciones de Wi-Fi públicas.
En esencia, un controlador WLAN actúa como el "cerebro" de una red inalámbrica, centraliza la gestión y la mejora de la eficiencia en comparación con la gestión de cada punto de acceso de forma independiente. Hay controladores basados en hardware (dispositivos físicos) y controladores basados en software (máquinas virtuales o servicios en la nube).