1. Conversión de datos: Los datos de su computadora o dispositivo (correos electrónicos, páginas web, videos, etc.) se convierten en señales digitales representadas por 0s y 1s.
2. Modulación: Estas señales digitales se modulan en una señal portadora de onda de radio. Esto significa que las características de la onda de radio (como su amplitud o frecuencia) se cambian para representar los 0s y 1s. Diferentes estándares WiFi (como 802.11a, B, G, N, AC, AX) utilizan diferentes técnicas de modulación para lograr velocidades y eficiencia más altas.
3. Transmisión: La onda de radio modulada se transmite luego por la antena del enrutador WiFi. La antena convierte la señal eléctrica en radiación electromagnética (ondas de radio) que se propagan a través del aire.
4. Propagación: Estas ondas de radio viajan por el aire, extendiéndose en todas las direcciones. Los obstáculos como las paredes y los muebles debilitan la señal.
5. Recepción: El adaptador WiFi en su dispositivo recibe estas ondas de radio con su propia antena.
6. Demodulación: El receptor demodula las ondas de radio, extrayendo la señal digital original de la onda portadora.
7. Reconstrucción de datos: Finalmente, la señal digital se convierte en datos utilizables para su dispositivo.
Esencialmente, las ondas de radio actúan como un operador de la información digital, lo que le permite viajar de forma inalámbrica entre su dispositivo y el enrutador. La frecuencia de las ondas de radio utilizadas por Wifi se encuentra en las bandas sin licencia de 2.4 GHz y 5 GHz, lo que permite un uso generalizado sin necesidad de licencias individuales para cada dispositivo. Sin embargo, esto también significa que comparten las ondas con otros dispositivos, lo que potencialmente conduce a la interferencia.