1. Adjuntos infectados:
* Cómo funciona: Este es el método más común. El correo electrónico contiene un archivo (por ejemplo, un documento, imagen, video, ejecutable) que está infectado con un virus.
* disfrazado: Los archivos adjuntos a menudo usan nombres o iconos diseñados para engañar al usuario para que piense que son archivos inofensivos. Los ejemplos comunes incluyen:
* .exe archivos disfrazados de imágenes: (por ejemplo, "lindo_cat.jpg.exe" - El .exe a menudo está oculto)
* Documentos de oficina infectados (Word, Excel): Estos pueden contener macros maliciosos (pequeños programas integrados dentro del documento). Cuando se abre el documento, un aviso pregunta si las macros deben estar habilitadas. Si el usuario los habilita, el virus se ejecuta.
* archivos PDF con scripts integrados: Similar a los documentos de la oficina, los PDF pueden contener un código integrado que se ejecuta cuando se abre.
* archivos de archivo (zip, rar): Estos pueden contener múltiples archivos infectados.
* Ingeniería social: El texto del correo electrónico está diseñado para crear una sensación de urgencia, curiosidad o autoridad para presionar al destinatario para que abran el archivo adjunto sin pensar.
2. Enlaces maliciosos (phishing):
* Cómo funciona: El correo electrónico contiene un enlace a un sitio web malicioso. Haga clic en el enlace conduce a:
* Descargas de manejo: El sitio web descarga e instala automáticamente malware en la computadora del usuario sin su consentimiento explícito. Esto a menudo explota las vulnerabilidades en el navegador o el sistema operativo del usuario.
* Páginas de inicio de sesión falsas (phishing): El sitio web imita una página de inicio de sesión legítima (por ejemplo, para un banco, sitio de redes sociales o proveedor de correo electrónico). Cuando el usuario ingresa su nombre de usuario y contraseña, el atacante roba la información. Esta información se puede utilizar para propagar el virus a los contactos de la víctima.
* malvertimiento: Los sitios web legítimos pueden mostrar sin saberlo anuncios maliciosos que redirigen a los usuarios a sitios web que alojan malware.
* Ingeniería social: Los enlaces a menudo se disfrazan de parecer URL legítimas o se usan URL de cortocircuito para ocultar el verdadero destino. El texto del correo electrónico generalmente utiliza tácticas similares como archivos adjuntos infectados para crear una sensación de urgencia o engañar al usuario.
3. Explotación de vulnerabilidades:
* Cómo funciona: Esto es menos común que los otros métodos, pero puede ser extremadamente peligroso. El correo electrónico en sí contiene un código que explota una vulnerabilidad de seguridad en el cliente de correo electrónico del destinatario, el sistema operativo u otro software. Esto puede permitir que el virus se ejecute automáticamente sin que el usuario incluso haga clic en un enlace o abra un archivo adjunto.
* Protección: Mantener el software actualizado con los últimos parches de seguridad es crucial para evitar este tipo de ataque.
4. Clientes de correo electrónico infectados (menos comunes):
* Cómo funciona: Un virus podría infectar al cliente de correo electrónico (por ejemplo, Outlook, Thunderbird). Esto permite que el virus se adhiera automáticamente a los correos electrónicos salientes, extendiéndose al destinatario. Esto es menos común hoy debido a una mejor seguridad en los clientes de correo electrónico.
Factores clave que habilitan la propagación del virus:
* Ingeniería social: Este es el elemento más importante. Los virus confían en engañar a los usuarios para que tomen acciones que normalmente no tomarían.
* Error humano: Incluso los usuarios técnicamente inteligentes pueden ser engañados convenciendo correos electrónicos de phishing o solicitudes urgentes.
* Software obsoleto: Las vulnerabilidades en versiones de software más antiguas a menudo son explotadas por virus.
* Falta de conciencia: Los usuarios que no son conscientes de los riesgos tienen más probabilidades de ser víctimas de virus por correo electrónico.
Cómo protegerse:
* Sospecho: Trate los correos electrónicos no solicitados con precaución, especialmente aquellos de remitentes desconocidos o que contienen archivos adjuntos o enlaces inesperados.
* Verificar remitente: Verifique dos veces la dirección de correo electrónico del remitente. Busque ortográficos sutiles o dominios inusuales. Incluso si se conoce el remitente, sospeche si el correo electrónico está fuera de lugar.
* No haga clic en enlaces sospechosos: Casta los enlaces antes de hacer clic para ver la URL real. Si parece sospechoso, no haga clic.
* No abra archivos adjuntos inesperados: Si no esperaba un archivo adjunto, verifique con el remitente antes de abrirlo.
* Mantenga el software actualizado: Instale los últimos parches de seguridad para su sistema operativo, navegador, cliente de correo electrónico y otro software.
* Use un programa antivirus de buena reputación: Mantenga su software antivirus actualizado y ejecute escaneos regulares.
* Habilitar la seguridad macro en la oficina: Deshabilite las macros por defecto y solo los habilite para documentos confiables.
* Use un filtro de spam: La mayoría de los proveedores de correo electrónico tienen filtros de spam incorporados que pueden ayudar a bloquear los correos electrónicos maliciosos.
* Use autenticación multifactor (MFA): Para cuentas importantes. Esto agrega una capa adicional de seguridad.
* Educate a ti mismo: Manténgase informado sobre las últimas estafas de correo electrónico y técnicas de phishing.
* Confía en tu instinto. Si algo se siente fuera del correo electrónico, probablemente lo sea.
Al comprender cómo los virus de correo electrónico se propagan y después de estas precauciones, puede reducir significativamente su riesgo de infección.