Virus tempranos:
* Brain (1986): Uno de los primeros virus, infectó discos disquetes y mostró un mensaje en la pantalla. Si bien no es particularmente dañino, preparó el escenario para futuras amenazas.
* Morris Worm (1988): Este gusano se extendió rápidamente a través de Internet, sobrecargando sistemas y causando un tiempo de inactividad significativo. Demostró el potencial de malware basado en Internet.
* Melissa (1999): Este macro virus se extendió a través de archivos adjuntos de correo electrónico y provocó que las computadoras infectadas enviaran copias de sí mismas a las primeras 50 personas en la libreta de direcciones del usuario.
amenazas modernas:
* Conficker (2008): Este gusano se extendió a través de vulnerabilidades en las ventanas y fue notoriamente difícil de eliminar. Su objetivo era robar datos y controlar máquinas infectadas.
* Wannacry (2017): Un ataque de ransomware que explotó una vulnerabilidad en Windows. En cifró archivos en computadoras infectadas y exigió un rescate en Bitcoin.
* Notpetya (2017): Un malware destructivo disfrazado de ransomware. Causó una interrupción generalizada en las empresas y la infraestructura, particularmente en Ucrania.
* Emotet (2014): Una botnet sofisticada que se extiende a través de correos electrónicos maliciosos y descarga otro malware en computadoras infectadas.
amenazas actuales:
* ransomware: Esto sigue siendo una amenaza significativa, con nuevas variantes que aparecen regularmente. El ransomware cifra los archivos y exige el pago de su descifrado.
* cryptojacking: Esto implica secuestrar recursos informáticos para extraer criptomonedas sin el consentimiento del usuario.
* Expotes de día cero: Estas vulnerabilidades son desconocidas para el software de seguridad y pueden ser explotadas por los atacantes antes de que los parches estén disponibles.
Cómo protegerse:
* Mantenga su software actualizado: Actualice regularmente su sistema operativo y aplicaciones para parchear las vulnerabilidades de seguridad.
* Use un programa antivirus de buena reputación: Instale y mantenga su software antivirus actualizado.
* Tenga cuidado con los archivos adjuntos y enlaces por correo electrónico: No abra los archivos adjuntos de los remitentes desconocidos y tenga cuidado con los enlaces, incluso de fuentes familiares.
* Haga una copia de seguridad de sus datos: Realice una copia de seguridad regular de sus archivos importantes a una unidad externa o servicio en la nube.
* Tenga en cuenta la ingeniería social: Tenga cuidado con los correos electrónicos de phishing y otros intentos de engañarlo para que renuncie a información personal.
Recuerde que el panorama de amenazas evoluciona constantemente, por lo que mantenerse informado y vigilante es crucial para proteger sus dispositivos y datos.