* Datos: Esto incluye cualquier tipo de información digital, como texto, números, imágenes, audio o archivos de video. La cantidad de datos depende en gran medida de la capacidad de memoria de la tarjeta.
* claves criptográficas: Estos son cruciales para la seguridad. Las tarjetas inteligentes a menudo contienen claves privadas para firmas digitales, cifrado y autenticación. Esto los hace ideales para la identificación segura y el procesamiento de transacciones.
* Certificados: Certificados digitales, que verifican la identidad del titular de la tarjeta o la aplicación que se ejecuta en la tarjeta. Estos a menudo se usan junto con claves criptográficas para una comunicación segura.
* Datos biométricos: Algunas tarjetas inteligentes pueden almacenar plantillas biométricas, como huellas digitales o escaneos de iris, para una mayor seguridad y autenticación.
* Programas de aplicación: Las tarjetas inteligentes pueden ejecutar pequeños programas (applets) que realizan tareas específicas. Esto permite una funcionalidad más compleja, como el procesamiento de pago seguro o el control de acceso.
* Información personal: Esto puede incluir cosas como nombre, dirección, fecha de nacimiento y otra información de identificación, dependiendo de la aplicación. Esto se usa a menudo en las tarjetas de identificación.
* Datos médicos: Las tarjetas inteligentes pueden almacenar registros médicos, permitiendo un acceso rápido a información vital en emergencias.
* Puntos de lealtad: Muchos programas de fidelización utilizan tarjetas inteligentes para almacenar y rastrear puntos de recompensa.
El tipo específico y la cantidad de información almacenada en una tarjeta inteligente están determinados por su diseño y la aplicación que admite. Por ejemplo, una tarjeta inteligente de una tarjeta de crédito contendrá datos diferentes en comparación con una tarjeta de identidad nacional o una tarjeta de control de acceso segura.