1. Verifique las conexiones de su iMac:
* Thunderbolt/USB-C: La mayoría de los iMacs modernos tienen puertos Thunderbolt/USB-C. Puede conectar un monitor directamente con un cable Thunderbolt/USB-C, o un adaptador para otros tipos de conexión como HDMI o DisplayPort.
* hdmi: Algunos iMacs mayores pueden tener puertos HDMI. Puede usar un cable HDMI para conectar un monitor.
2. Conecte su monitor:
* directamente: Si su monitor tiene el mismo tipo de conexión que su iMac (Thunderbolt/USB-C o HDMI), simplemente conéctelos con un cable.
* adaptador: Si su monitor tiene un tipo de conexión diferente, necesitará un adaptador compatible. Por ejemplo, si su monitor tiene DisplayPort pero su iMac solo tiene Thunderbolt/USB-C, necesitará un trueno/USB-C para el adaptador DisplayPort.
3. Configure su configuración de visualización:
* Barra de menú Mac: Haga clic en el icono Apple en la esquina superior izquierda de su pantalla, luego seleccione Configuración del sistema .
* Muestra: Seleccione las pantallas opción.
* Arreglo: Bajo Arreglo , verá la pantalla de su iMac y el monitor conectado. Puede arrastrar y soltar los iconos del monitor para organizarlos en el diseño deseado.
* Resolución: Puede ajustar la resolución de cada pantalla individualmente.
* Espejo o extiende: Puede optar por "reflejar" sus pantallas, que mostrarán el mismo contenido en ambas pantallas, o las "extenderán", lo que creará un espacio de trabajo de escritorio más grande.
Consejos:
* Compatibilidad del monitor: Asegúrese de que su monitor sea compatible con las conexiones de su iMac y admite la resolución deseada.
* Calidad del cable: Use cables de alta calidad para evitar problemas de señal.
* Actualizaciones del controlador: Asegúrese de tener los últimos controladores para su monitor instalado.
¡Eso es todo! Una vez que haya conectado su monitor y haya configurado la configuración, tendrá un espacio de trabajo más grande para disfrutar.