1. Reinicie su computadora. Esto puede parecer una solución simple, pero a menudo puede solucionar problemas menores de software que pueden estar afectando el uso de la memoria.
2. Compruebe la configuración de su BIOS. Algunas computadoras tienen una configuración en el BIOS que limita la cantidad de memoria que se puede utilizar. Asegúrese de que esta configuración esté configurada en "Auto" o "Habilitado". Dependiendo de su BIOS, es posible que también pueda ajustar los tiempos de RAM aquí.
3. Compruebe si hay virus o malware. En ocasiones, el malware puede afectar el uso de la memoria. Utilice un programa antivirus actualizado para escanear su computadora y eliminar cualquier archivo infectado.
4. Actualice sus controladores. Los controladores obsoletos a veces pueden causar problemas de memoria. Visite el sitio web del fabricante de su computadora y descargue los controladores más recientes para su placa base, chipset y tarjeta gráfica.
5. Realice una prueba de memoria. Una prueba de memoria puede identificar chips de memoria defectuosos que pueden estar causando problemas. Para realizar una prueba de memoria, siga estos pasos:
Abra el menú Inicio de Windows y escriba mdsched.exe en el cuadro de búsqueda.
Haga clic en Aceptar. y siga las instrucciones para ejecutar la Herramienta de diagnóstico de memoria.
Si la prueba de memoria encuentra chips de memoria defectuosos, deberá reemplazarlos por otros nuevos.
6. Actualiza tu memoria. Si ha probado todos los pasos anteriores y todavía experimenta un uso bajo de memoria, es posible que necesite actualizarla. Para hacer esto, necesitará determinar qué tipo de memoria usa su computadora y luego comprar e instalar nuevos chips de memoria que sean compatibles con su computadora.