* Entrada: Una señal de audio (señal eléctrica que representa ondas de sonido) se alimenta al altavoz de agua. Esto suele ser de un teléfono inteligente, computadora u otra fuente de audio.
* Proceso: La señal de audio se convierte en vibraciones. Esto sucede a través de un transductor (a menudo un elemento piezoeléctrico o electromagnet) que interactúa con el agua. Las vibraciones hacen que el agua vibre, creando ondas de sonido dentro del agua misma. Estas ondas de sonido luego se propagan a través del agua.
* Salida: El agua vibrante crea ondas de presión que viajan a través del agua. Estas ondas de presión se convierten nuevamente en ondas de sonido audibles para una persona a través de un segundo transductor o simplemente por el agua que interactúa directamente con el aire en la superficie (aunque esto es menos eficiente). El sonido resultante a menudo se describe como un sonido suave y sutil.
En resumen:señal eléctrica (entrada) → Vibraciones de agua (proceso) → ondas de sonido (salida). La eficiencia del proceso depende del diseño del altavoz y del tipo de agua utilizada.