amenazas dirigidas al cliente:
* malware: Los virus, gusanos, troyanos, ransomware y spyware pueden infectar a las máquinas clientes, otorgando a los atacantes acceso a datos confidenciales, recursos del sistema o utilizando al cliente como una plataforma de lanzamiento para ataques adicionales (por ejemplo, botnets).
* Phishing and Social Engineering: Engañar a los usuarios para que revelen credenciales o descargen software malicioso a través de correos electrónicos engañosos, sitios web u otros medios.
* ataques de man-in-the-browser (MITB): Malware que intercepta y manipula la comunicación entre el navegador y el servidor, lo que permite a los atacantes robar información confidencial como contraseñas y detalles de la tarjeta de crédito.
* Descargas de manejo: El código malicioso se descarga automáticamente a una máquina de cliente simplemente visitando un sitio web comprometido.
* Software sin parches: El software obsoleto con vulnerabilidades conocidas hace que los clientes sean objetivos fáciles para la explotación.
amenazas dirigidas al servidor:
* Atacos de denegación de servicio (DOS) y de denegación de servicio distribuida (DDoS): Abrumando el servidor con el tráfico, lo que no está disponible para los usuarios legítimos.
* inyección SQL: Explotando vulnerabilidades en consultas de bases de datos para obtener acceso no autorizado a datos confidenciales.
* Scripting de sitio cruzado (XSS): Inyectando scripts maliciosos en sitios web para robar información del usuario o sesiones de secuestro.
* Inclusión de archivos remotos (RFI) e inclusión de archivos locales (LFI): Explotar las vulnerabilidades para incluir y ejecutar archivos maliciosos en el servidor.
* desbordamiento del búfer: Explotación de vulnerabilidades de gestión de memoria para ejecutar código arbitrario en el servidor.
* Fase de solicitud del lado del servidor (SSRF): Explotando vulnerabilidades para realizar solicitudes a servidores internos u otros recursos de red en nombre del servidor.
* Escalación de privilegios: Obtener acceso no autorizado a los privilegios del sistema de nivel superior en el servidor.
* Software del servidor sin parches: Similar a los clientes, el software de servidor obsoleto es un objetivo principal para los ataques.
amenazas dirigidas al canal de comunicación:
* ataques de man-in-the-middle (mitm): Interceptando la comunicación entre el cliente y el servidor para espiar, modificar datos o inyectar código malicioso.
* Evesdropping: Interceptar el tráfico de la red para capturar datos confidenciales (a menudo requiere técnicas como el olfateo de paquetes).
* Irigas de datos: Acceso no autorizado a los datos transmitidos entre el cliente y el servidor.
* secuestro de sesión: Asumir una sesión establecida entre el cliente y el servidor.
* Sniffing de la red: Interceptar el tráfico de red (a menudo requiere acceso físico a un grifo o un centro de red).
Estrategias de mitigación:
Abordar estas amenazas requiere un enfoque de múltiples capas, que incluya:
* Autenticación y autorización fuertes: Contraseñas seguras, autenticación multifactor (MFA) y listas de control de acceso (ACL).
* Seguridad de red: Firewalls, sistemas de detección/prevención de intrusos (IDS/IPS) y redes privadas virtuales (VPN).
* Cifrado de datos: Protección de datos en reposo y en tránsito utilizando protocolos de cifrado (por ejemplo, TLS/SSL).
* Actualizaciones y parches regulares de software: Manteniendo el software del cliente y el servidor actualizado con parches de seguridad.
* Capacitación de conciencia de seguridad: Educar a los usuarios sobre phishing, ingeniería social y otras amenazas de seguridad.
* Validación de entrada y desinfección: Evitando que el servidor procese la entrada maliciosa.
* Auditorías de seguridad regulares y pruebas de penetración: Identificar y abordar las vulnerabilidades de manera proactiva.
Es importante recordar que la seguridad del cliente-servidor es un proceso continuo, que requiere una vigilancia constante y adaptación a nuevas amenazas y vulnerabilidades.