* aumentó el ancho de banda: Esta es la mejora más significativa. Los cables de fibra óptica pueden transportar mucho más datos que los cables de cobre tradicionales. El ancho de banda disponible permite velocidades significativamente más altas y la transmisión de volúmenes mucho más grandes de datos simultáneamente. Esto respalda la explosión del uso de Internet, la transmisión de video de alta definición y otras aplicaciones intensivas en ancho de banda.
* Distancias más largas sin repetidores: Las señales que viajan a través de alambres de cobre se degradan sobre la distancia, lo que requiere que los repetidores aumenten la señal. Los cables de fibra óptica transmiten señales con mucho menos atenuación (pérdida de señal), lo que permite distancias de transmisión mucho más largas sin la necesidad de repetidores frecuentes. Esto simplifica la infraestructura de la red y reduce los costos.
* Calidad de señal mejorada: La fibra óptica transmite datos como pulsos de luz, que son menos susceptibles a la interferencia electromagnética (EMI) que las señales eléctricas en cables de cobre. Esto da como resultado señales más claras y menos errores, lo que lleva a una comunicación más confiable.
* Seguridad: Aprovechar un cable de fibra óptica para interceptar datos es mucho más difícil que aprovechar los cables de cobre. Esta seguridad mejorada es crucial para proteger la información confidencial.
* Tamaño y peso más pequeños: Los cables de fibra óptica son más delgados y más ligeros que los cables de cobre que transportan la misma cantidad de datos. Esto los hace más fáciles de instalar y manejar, especialmente en entornos urbanos densos o instalaciones subterráneas.
* rentable (a largo plazo): Si bien la inversión inicial en infraestructura de fibra óptica puede ser mayor, los ahorros de costos a largo plazo debido al aumento del ancho de banda, el mantenimiento reducido (menos repetidores) y la confiabilidad mejorada a menudo superan el gasto inicial.
En resumen, la fibra óptica permitió un salto cuántico en capacidad de telecomunicaciones, velocidad, confiabilidad y seguridad, cambiando fundamentalmente la forma en que comunicamos y accedemos a la información a nivel mundial. Es la columna vertebral de Internet moderno y muchas otras redes de comunicación de alto ancho de banda.