* Velocidad del plan de banda ancha: Su plan de banda ancha (cable, DSL, fibra) tiene una velocidad anunciada específica. Esta es la velocidad máxima que su * conexión a Internet * puede lograr.
* Capacidades de enrutador inalámbrico: Su enrutador Wi-Fi tiene sus propias limitaciones. Los enrutadores más antiguos utilizan estándares Wi-Fi más lentos (como 802.11b/g/n), mientras que los más nuevos utilizan 802.11ac u 802.11ax (Wi-Fi 6/6e), ofreciendo velocidades significativamente más rápidas. La potencia de procesamiento del enrutador también juega un papel.
* congestión de la red: Múltiples dispositivos que usan la misma red Wi-Fi pueden ralentizar las conexiones individuales. La interferencia de otros dispositivos inalámbricos (microondas, teléfonos inalámbricos) también puede afectar las velocidades.
* Distancia y obstáculos: Las señales de Wi-Fi se debilitan con la distancia y están bloqueadas por paredes, muebles y otros obstáculos. Cuanto más lejos esté del enrutador, o más obstrucciones entre usted y el enrutador, más lenta será su conexión.
* canal Wi-Fi: Elegir un canal Wi-Fi menos congestionado puede mejorar las velocidades.
En resumen: Si tiene un plan de banda ancha rápida pero un enrutador Wi-Fi antiguo y sobrecargado, o si está lejos del enrutador con muchos obstáculos, su conexión inalámbrica * probablemente * será más lenta que el potencial de su conexión de banda ancha. Sin embargo, con un enrutador moderno y de alto rendimiento, una señal clara y una congestión de red mínima, su velocidad de Wi-Fi podría estar muy cerca de la velocidad de su banda ancha. La red inalámbrica es esencialmente una * red de área local * utilizando su conexión de banda ancha como su puerta de enlace de Internet. Es un elemento separado en el proceso de conexión general.