* Latencia reducida/tiempos de respuesta más rápidos: Esta es la ventaja más destacada. Cuando un usuario solicita una página web, el caché verifica si tiene una copia. Si lo hace (un "golpe de caché"), sirve al contenido directamente, sin pasar por el servidor de origen. Esto es mucho más rápido que obtener los datos del servidor potencialmente distante, lo que resulta en tiempos de carga más rápidos para los usuarios.
* Congestión de red reducida: Al servir contenido de cachés locales, se envía menos tráfico en la red troncal de la red. Esto reduce el consumo de ancho de banda y la congestión, lo que lleva a un mejor rendimiento general de la red para todos. Los servidores de origen están menos cargados, lo cual es particularmente beneficioso durante los tiempos de uso máximo.
* Escalabilidad mejorada: El almacenamiento en caché ayuda a la red a manejar más usuarios y solicitudes sin requerir actualizaciones significativas para la infraestructura. Los servidores son menos tensos, lo que les permite servir a más usuarios de manera eficiente.
* Carga de servidor reducido: Los servidores de origen reciben menos solicitudes, lo que lleva a una carga de procesamiento reducida y una mejor longevidad del servidor. Esto puede reducir los costos del servidor y las necesidades de mantenimiento a largo plazo.
* aumentó la disponibilidad: Si un servidor baja temporalmente, se pueden servir copias en caché del contenido, evitando interrupciones completas para los usuarios. Esto mejora la fiabilidad general y la disponibilidad de los servicios web.
* ahorros de costos: El uso reducido del ancho de banda y la carga del servidor se traduce directamente en costos operativos más bajos para proveedores de redes y propietarios de sitios web.
En resumen, el almacenamiento en caché web mejora el rendimiento, la escalabilidad, la disponibilidad y reduce los costos, lo que lleva a una experiencia de usuario significativamente mejor y una operación de red más eficiente.