Si bien la infraestructura física subyacente puede usar una variedad de tecnologías (fibra óptica, cables de cobre, inalámbrico, etc.), el enlace lógico abstrae estas diferencias. Presenta una interfaz y vía consistentes para la transmisión de datos entre los nodos, independientemente de la implementación física. Los ejemplos incluyen:
* direcciones IP y enrutamiento: Independientemente de la ruta física que toma un paquete (que podría involucrar muchos enlaces físicos y tecnologías de red diferentes), las direcciones IP y los protocolos de enrutamiento determinan la ruta lógica. Las direcciones IP de origen y destino definen la conexión lógica.
* Circuitos virtuales (VCS): En tecnologías como Frame Relay y ATM, un circuito virtual establece una conexión lógica entre dos nodos. Múltiples circuitos virtuales pueden compartir los mismos enlaces físicos.
* redes definidas por software (SDN): SDN permite el mapeo dinámico y flexible de las conexiones lógicas a la infraestructura física subyacente. El plano de control separa la configuración de la red lógica de la red física, lo que permite abstracciones que hacen que diversos enlaces físicos aparezcan como una red única y unificada.
* túneles (por ejemplo, VPNS): El túnel crea una conexión lógica entre dos puntos que pueden separarse físicamente por varias redes. Los datos se encapsulan dentro del túnel, ocultando las conexiones físicas subyacentes.
En esencia, los enlaces lógicos representan la conectividad * funcional * entre nodos, independientemente de la implementación * física * subyacente. Proporcionan una vista unificada de la red, simplificando la gestión y facilitando la agregar, eliminar o cambiar los enlaces físicos sin afectar la topología de la red lógica.