* Utilice más recursos del sistema: Monitorear constantemente la actividad, el filtrado de sitios web o la ubicación de seguimiento pueden usar una pequeña cantidad de CPU y RAM. Es más probable que esto sea notable en computadoras portátiles más antiguas o de menor potencia.
* Interferir con otras aplicaciones: Si el software de control parental está mal diseñado o entra en conflicto con otros programas, podría conducir a desaceleraciones o inestabilidad.
* Escanee grandes cantidades de datos: Algunas características, como el filtrado de contenido, pueden requerir escanear grandes cantidades de datos (archivos descargados, páginas web), lo que podría ralentizar temporalmente las cosas.
Sin embargo, en la mayoría de los casos, el impacto en el rendimiento del software de control parental bien diseñado es insignificante. Si experimenta desaceleraciones significativas después de instalar controles parentales, es más probable que se deba a otros factores, como malware, RAM insuficiente o un disco duro fallido.