Sin embargo, hay formas en que * podrías * obtener un virus mientras juegas WoW:
* complementos de terceros maliciosos: Muchos jugadores usan complementos para mejorar su experiencia WOW. Si descarga un complemento de una fuente no confiable, podría contener malware. Solo descargue complementos de fuentes acreditadas como Curseforge (ahora conocido como Overwolf).
* estafas de phishing: Los estafadores pueden tratar de engañarlo para que les dé detalles de su cuenta o descargando malware haciéndose pasar por los empleados de Blizzard o ofreciendo recompensas falsas en el juego. Tenga cuidado con los mensajes o enlaces no solicitados.
* Cuentas comprometidas: Si su cuenta WOW se ve comprometida, un actor malicioso podría usarlo para difundir el malware a los demás (aunque esto es menos común). Use contraseñas fuertes y únicas y habilite el autenticador para una seguridad adicional.
* Cliente de juego sin parches: Mantener a su cliente WOW actualizado es crucial para la seguridad. Las actualizaciones regulares a menudo incluyen parches para abordar las vulnerabilidades.
En resumen: wow en sí no es un virus. Los riesgos están asociados con sus acciones y las fuentes con las que interactúa * mientras juegas * el juego. Si se adhiere a fuentes oficiales para complementos y es cauteloso con los intentos de phishing, su riesgo de infección es extremadamente bajo.