Windows:
* Manager de tareas: Presione Ctrl + Shift + Esc para abrir el administrador de tareas.
* Haga clic en la pestaña "Procesos". Esto mostrará todas las aplicaciones en ejecución.
* Seleccione la aplicación que desea cerrar. Puede hacer clic derecho y elegir "Tarea final" o seleccionarla y hacer clic en el botón "Tarea final" en la esquina inferior derecha.
macOS:
* Force Quit: Si una aplicación está congelada o no responde, use Opción + comando + ESC . Esto abrirá la ventana de aplicaciones Force.
* Seleccione la aplicación que desea cerrar y haga clic en "Fuerza deja de fumar".
* Monitor de actividad: Para ver todas las aplicaciones en ejecución, abra Monitor de actividad (Búscalo en el centro de atención). Busque la aplicación que desea cerrar, seleccione y haga clic en el botón "Salir del proceso" en la esquina superior izquierda.
Linux:
* terminal: Abra una ventana de terminal.
* Use el comando `ps aux` Para enumerar todos los procesos en ejecución. Puede identificar el proceso por su nombre o PID (ID de proceso).
* Use `Kill -9
* GUI: La mayoría de las distribuciones de Linux tienen un administrador de tareas o un monitor de sistema que proporciona una interfaz gráfica para administrar las aplicaciones en ejecución.
Android:
* Aplicaciones recientes: Toque el botón "Aplicaciones recientes" (generalmente un cuadrado o un círculo).
* deslice la aplicación que desea cerrar arriba y fuera de la pantalla.
iOS:
* Slip Up: Deslice desde la parte inferior de la pantalla para abrir el conmutador de aplicaciones.
* deslice hacia arriba en la aplicación: Deslice la vista previa de la aplicación que desea cerrar para eliminarlo.
Notas importantes:
* Siempre intente cerrar aplicaciones normalmente. Usar "Force Quit" o `Kill -9` solo debe usarse como último recurso cuando una aplicación está congelada o no respondida.
* Tenga cuidado con los procesos del sistema de cierre. El cierre de procesos esenciales del sistema puede hacer que su computadora se vuelva inestable o en mal funcionamiento.
* Si no está seguro de cerrar un proceso, consulte la documentación o busque en línea su sistema operativo.
Recuerde que las aplicaciones de cierre a menudo requieren guardar su trabajo antes de salir. Es posible que pierda los datos no salvos si forra cerrar una aplicación sin guardar.