He aquí por qué:
* Los iPads modernos están diseñados para uso continuo: Tienen sistemas eficientes de gestión de energía y duración de la batería larga, lo que hace innecesarios los cierres frecuentes.
* El cierre no ofrece beneficios significativos: A diferencia de los dispositivos más antiguos, los iPads modernos no se benefician de las paradas regulares en términos de rendimiento o duración de la batería.
* El cierre puede ser inconveniente: Agrega un paso adicional a su flujo de trabajo y puede interrumpir sus actividades.
Sin embargo, hay algunas situaciones en las que apagar su iPad puede ser beneficioso:
* Si está experimentando problemas de rendimiento: Un reinicio a veces puede resolver falsos o desaceleraciones menores.
* Si no lo va a usar durante un período prolongado: Esto puede ayudar a conservar la duración de la batería si no va a usar el iPad durante unos días o semanas.
* Si viajas con él: Apagando su iPad puede ayudar a prevenir la activación accidental y ahorrar duración de la batería durante el viaje.
En última instancia, la decisión de cerrar o no su iPad depende de usted. Si no está experimentando ningún problema y es conveniente que lo deje encendido, entonces no es necesario cerrarlo después de cada uso.