Si bien escribir y borrar constantemente datos puede contribuir al desgaste durante muchos años, el interruptor de protección de escritura no tiene un impacto significativo significativamente. Su función principal es bloquear cualquier operación de escritura al medio de almacenamiento. Esto significa que no puede eliminar accidentalmente archivos, formatear la unidad o tener un programa sobrescribir datos.
Por lo tanto, el conmutador ofrece protección contra el error del usuario, pero no necesariamente contra la degradación gradual de la memoria flash en sí. La vida útil está más determinada por factores como el número de ciclos de escritura/borrado que la memoria flash puede manejar (que es inherentemente limitada), fluctuaciones de temperatura y aumentos de potencia.