Esto se logra a través de circuitos internos que detectan el voltaje y la frecuencia de entrada y ajusta su operación en consecuencia. Esto los hace extremadamente convenientes para su uso en diferentes países y regiones con diferentes estándares eléctricos. En lugar de necesitar una fuente de alimentación diferente para cada país, una sola fuente de alimentación de cambio automático puede funcionar a nivel mundial.
Características clave de una fuente de alimentación de cambio automático:
* Entrada de rango de voltaje amplio: Típicamente 100-240VAC, que cubre la mayoría de los estándares globales.
* Detección de frecuencia automática: Se adapta a frecuencias de CA de 50Hz o 60Hz.
* sin conmutación manual: Los usuarios no necesitan seleccionar el voltaje o la frecuencia de entrada.
* Eficiencia: Por lo general, más eficiente que los suministros lineales, lo que significa menos energía desperdiciada.
* Tamaño compacto: A menudo más pequeño y más ligero que otros tipos de fuente de alimentación.
Si bien generalmente es confiable y conveniente, es importante tener en cuenta que el voltaje de salida y la corriente se fijan por diseño, y la unidad solo funcionará dentro de sus rangos de voltaje y frecuencia de entrada especificados. Empujarlo más allá de esos límites puede dañar la fuente de alimentación.