Un firewall utiliza tanto hardware (un dispositivo dedicado o un componente dentro de un enrutador u otro dispositivo de red) y software (el sistema operativo y los conjuntos de reglas que rigen el comportamiento del hardware) para inspeccionar el tráfico de red y bloquearlo o permitirlo basándose en reglas predefinidas. Estas reglas pueden basarse en factores como la dirección IP, el número de puerto, el protocolo y el contenido.