Configuraciones comunes (TIA/EIA 568A y 568B son las más frecuentes):
Tanto 568a como 568B usan cuatro pares de cables. La diferencia clave se encuentra en el orden de color de los cables en cada extremo. Esta diferencia es importante para una conexión adecuada, y consistencia es crítico; Ambos extremos deben usar el mismo estándar (ya sea A o B en todo momento). La mezcla A y B darán como resultado una conexión no funcional.
* par 1 (típicamente verde): Utilizado para transmitir y recibir datos. En 1000Base-T (Gigabit Ethernet) y más rápido, este par lleva las señales de frecuencia más altas.
* par 2 (típicamente naranja): Utilizado para transmitir y recibir datos. En 1000Base-T y más rápido, este par también tiene señales de alta frecuencia.
* par 3 (típicamente azul): Utilizado para transmitir y recibir datos. En 1000Base-T y más rápido, este par lleva señales de alta frecuencia.
* par 4 (típicamente marrón): Utilizado para transmitir y recibir datos. En 1000Base-T y más rápido, este par lleva señales de alta frecuencia.
Dentro de cada par:
Cada par consta de dos cables:
* un cable: Transmite datos.
* un cable: Recibe datos.
El cable específico dentro de un par utilizado para transmitir versus recibir no es fijo, está determinado por el esquema de señalización. Los cables se torcen para minimizar la interferencia entre los pares y equilibrar las impedancias de la señal.
Nota importante: Si bien lo anterior describe la función general, el uso exacto de cada par puede variar ligeramente dependiendo de la tecnología de red específica (por ejemplo, 10Base-T, 100Base-TX, 1000Base-T, etc.) y la implementación. Sin embargo, el principio fundamental permanece:cada par lleva señales de datos y la torsión es crucial para minimizar la interferencia. Los códigos de color ayudan a garantizar el cableado correcto para una comunicación consistente.