No hay datos disponibles públicamente sobre el número preciso de discos duros de 500 GB que han fallado (o "cocinado", como dice el coloquialismo) en iMacs. Apple no libera este tipo de datos de tasa de falla granular, y el seguimiento independiente de este componente de hardware específico en todos los modelos y generaciones de iMac sería una tarea masiva. Dicha información generalmente se considera propietaria y confidencial por razones comerciales.