* Latencia: Acceder a los datos desde la memoria principal (RAM) es significativamente más lento que el acceso a los datos desde la CPU. La diferencia son los órdenes de magnitud. Esta latencia es un gran cuello de botella en el rendimiento de la computadora.
* proximidad: Colocación del caché L1 en el troquel de CPU (la oblea de silicio en la que se construye la CPU) reduce drásticamente la distancia física que los datos deben viajar. Esta distancia más corta se traduce directamente en tiempos de acceso más rápidos. Las señales eléctricas no tienen que atravesar largas trazas en la placa base o viajar a través de múltiples componentes.
* ancho de banda: Mover datos entre la CPU y la RAM consume ancho de banda. Al mantener los datos de acceso frecuente en el caché L1, la CPU reduce la demanda de un ancho de banda de memoria principal, lo que permite que el sistema maneje más tareas de manera simultánea y de manera más eficiente.
En esencia, el caché L1 actúa como un scratchpad extremadamente rápido, pequeño y fácilmente disponible para la CPU. Sostiene los datos que es más probable que la CPU necesite de inmediato, mejorando drásticamente el rendimiento. Mientras que existen cachés más grandes (L2 y L3) fuera del núcleo de la CPU pero aún en el dado de la CPU, la proximidad del L1 es primordial para maximizar la velocidad de la CPU.