* Número de núcleos: Un procesador con múltiples núcleos puede realizar más fracasos que un procesador de un solo núcleo a la misma velocidad de reloj.
* Número de hilos por núcleo (HyperThreading): HyperThreading permite que un núcleo maneje múltiples hilos simultáneamente, aumentando los posibles fracasos.
* Capacidades de procesamiento vectorial (SIMD): Los procesadores modernos utilizan instrucciones SIMD (instrucción única, múltiples datos) para realizar operaciones en múltiples puntos de datos simultáneamente, aumentando significativamente los flops. Las instrucciones SIMD específicas respaldadas y su eficiencia afectan en gran medida el rendimiento.
* Arquitectura de la unidad de punto flotante (FPU): El diseño y las capacidades de la FPU afectan directamente cuántas operaciones de punto flotante pueden manejar el procesador por ciclo de reloj.
* Arquitectura del conjunto de instrucciones (ISA): Diferentes ISA tienen diferentes capacidades y eficiencias.
* Variaciones de velocidad de reloj: Los procesadores no siempre funcionan a su velocidad máxima del reloj. Turbo Boost o tecnologías similares pueden aumentar temporalmente la velocidad, mientras que las características de ahorro de energía pueden disminuirla.
Un procesador de 2.3 GHz podría variar desde unos pocos GFLOP (miles de millones de fracasos) en un diseño muy antiguo y simple hasta decenas o incluso cientos de GFLOP en un procesador moderno de múltiples núcleos con capacidades SIMD avanzadas. Para conocer los fracasos, debe considerar los resultados de referencia específicos de ese modelo de procesador. Los sitios web como Passmark u otros especializados en puntos de referencia de hardware proporcionan estos datos.