* metales reactivos: Evite los recipientes de aluminio, acero y hierro, ya que los ácidos pueden reaccionar con estos metales, lo que lleva a la corrosión y la contaminación de los alimentos con iones metálicos. Esto puede afectar el sabor y potencialmente ser perjudicial para la salud.
Las opciones adecuadas incluyen:
* Glass: El vidrio es un material inerte y es excelente para almacenar alimentos ácidos. No es reactivo, no lixivian productos químicos y es fácil de limpiar. Es una excelente elección general.
* plásticos de grado alimenticio: Algunos plásticos están diseñados para resistir los ácidos. Busque contenedores específicamente etiquetados como "de grado alimenticio" y sin BPA. Verifique el código de identificación de resina del plástico (a menudo un número dentro de un símbolo de flechas de persecución) para asegurarse de que sea adecuado para alimentos ácidos (por ejemplo, #2 HDPE, #4 LDPE, #5 PP generalmente son mejores opciones que otras). Sin embargo, incluso los plásticos de grado alimenticio pueden degradarse con el tiempo con el uso repetido y la exposición a altas temperaturas o ácidos fuertes, por lo que inspeccionarlos regularmente en busca de signos de daño o lixiviación.
* Acero inoxidable (específicamente 18/8 o 304 acero inoxidable): Mientras que algunos aceros son reactivos, el acero inoxidable 18/8 o 304 es más resistente a los ácidos que a otros tipos. Todavía no es tan ideal como el vidrio, pero es una mejor opción que muchos otros metales. Sin embargo, verifique siempre cualquier signo de picaduras o corrosión.
Nota importante: Siempre verifique el etiquetado del contenedor para confirmar su idoneidad para los alimentos ácidos y el ácido específico que está almacenando. Evite almacenar ácidos altamente concentrados en cualquier cosa, pero los contenedores de nivel de laboratorio de diseño adecuado.