1. Resolución y vector vs. gráficos de trama:
* gráficos ráster (por ejemplo, JPEG, PNG, BMP): Estos están formados por píxeles. Escalarlos los hace borrosos porque esencialmente estirando los píxeles existentes. Una impresión creada a partir de una imagen ráster de baja resolución se verá terrible cuando se amplíe. La escalabilidad es muy limitada. Para verificar:examinar las dimensiones de píxeles. Una imagen de alta resolución (por ejemplo, 300 ppp o más para la impresión) se escalará mejor que una de baja resolución.
* gráficos vectoriales (por ejemplo, AI, SVG, EPS): Estos están hechos de ecuaciones matemáticas que definen formas y líneas. Se pueden escalar a cualquier tamaño sin perder calidad porque la computadora los vuelve a dibujar al nuevo tamaño. Una impresión creada a partir de gráficos vectoriales es inherentemente escalable. Para verificar:examinar el formato de archivo. Los formatos vectoriales son inherentemente escalables.
2. Tipos de letra y fuentes:
* Fuentes de contorno: Estas fuentes, como los gráficos vectoriales, se definen matemáticamente y se escalan bien. La mayoría de las fuentes modernas son fuentes de contorno.
* Fuentes de mapa de bits: Estas son imágenes ráster y sufren los mismos problemas de escalabilidad que los gráficos de trama. Se pondrán pixelados cuando se agranden.
3. Calidad de imagen:
* nitidez: Incluso los gráficos vectoriales pueden parecer borrosos si las imágenes de origen originales integradas dentro de ellas eran de baja resolución.
* Detalle: Una imagen altamente detallada puede aparecer pixelada o perder sus detalles finos cuando se amplía significativamente, incluso si es técnicamente una imagen vectorial.
4. Proceso de impresión:
* Resolución del dispositivo de impresión: La impresora en sí tiene un límite para su resolución. Incluso un gráfico vectorial perfectamente escalable estará limitado por la capacidad de la impresora. Una impresora de mayor resolución (por ejemplo, 1200 ppp o más) manejará mejor las impresiones grandes.
* Método de impresión: Algunos métodos de impresión (como la impresión de pantalla) tienen limitaciones en los detalles finos y pueden no representar bien elementos pequeños a grandes escalas.
Cómo verificar la escalabilidad:
1. Examine el formato de archivo: ¿Es un formato vectorial (AI, SVG, EPS) o un formato ráster (JPEG, PNG, TIFF)? Vector es inherentemente mejor para la escalabilidad.
2. Verifique la resolución: Si es una imagen ráster, ¿cuál es su DPI (puntos por pulgada)? El DPI más alto es mejor para ampliar. Para la impresión, generalmente se recomienda 300 ppp o más.
3. Prueba la escala: Intente escalar la imagen o el diseño a un tamaño más grande en su software de diseño. ¿Mantiene su nitidez y detalle? Si se vuelve borrosa o pixelada, no es escalable.
4. Considere el proceso de impresión: Conozca las capacidades de su impresora o servicio de impresión.
En resumen, la escalabilidad no es una respuesta simple de sí/no. Se trata de evaluar la resolución del material de origen, el formato de archivo y las capacidades del proceso de impresión. Una impresión verdaderamente escalable es una creada completamente a partir de gráficos vectoriales con imágenes fuente de alta resolución e impresa en una impresora de alta resolución.