Los factores limitantes son:
* Longitud del cable: La longitud física del cable que conecta su GPU a su monitor es la restricción más inmediata. Si bien los cables como HDMI y DisplayPort se pueden extender utilizando adaptadores activos, existen límites prácticos sobre hasta qué punto puede extenderlos antes de que la degradación de la señal se vuelva inaceptable. Las distancias más largas a menudo requieren refuerzos de señal activos o cables de fibra óptica.
* Degradación de la señal: Incluso con cables largos y adaptadores activos, la calidad de la señal se degrada a la distancia. Esto puede provocar imágenes borrosas, parpadeantes o ninguna señal en absoluto.
* Limitaciones específicas de hardware: Algunas tarjetas y monitores gráficos pueden tener limitaciones en la longitud máxima del cable que admiten, incluso con extensores activos.
En resumen, no hay una respuesta definitiva. Potencialmente, podría tener una CPU y monitorear muchas decenas o incluso cientos de metros de distancia con refuerzos de cableado y señal apropiados, pero esta sería una configuración compleja y costosa. Para el uso típico del hogar u oficina, las limitaciones prácticas son mucho más cortas, probablemente en el rango de decenas de metros como máximo antes de que los problemas de señal se vuelvan significativos, dependiendo del tipo de conexión utilizada.