* completamente vacío: Este es el escenario ideal. Formateará esta partición durante el proceso de instalación de Windows, asegurando una instalación limpia.
* Formateado como NTFS: Windows puede instalar en una partición con formato NTFS, pero tenga en cuenta que cualquier datos existentes en esa partición se perderá durante el proceso de instalación. Se le pedirá que formateará la partición.
Partitions para evitar:
* Partitions con sistemas operativos activos: Instalar Windows en una partición que ya tiene un sistema operativo probablemente conducirá a conflictos y problemas de arranque.
* Partición reservada del sistema: Esta pequeña partición es crucial para arrancar ventanas y no debe ser tocada o formateada a menos que sepa exactamente lo que está haciendo. En general, el instalador se manejará automáticamente.
* Particiones de recuperación: Estas particiones contienen herramientas de recuperación importantes y no deben modificarse a menos que sea absolutamente necesario.
En resumen, si bien * puede * reinstalar técnicamente ventanas en una partición NTFS preexistente, se recomienda usar una partición completamente vacía o una que esté dispuesto a borrar por completo. Esto garantiza una instalación limpia y estable.