* Sistema de archivos: El sistema de archivos del disco duro debe ser compatible. Macs lee y escribe de forma nativa a APFS (el propio sistema de archivos de Apple) y exfat. Pueden * leer * NTFS (sistema de archivos de Windows) pero no pueden * escribirle * sin software de terceros. Si la unidad está formateada en un sistema de archivos menos común, es posible que deba reformatearla (que borra todos los datos).
* Tipo USB: Asegúrese de que el tipo de conexión USB (USB-A, USB-C, USB 3.0, USB 2.0, etc.) sea compatible con su Mac. La mayoría de las Mac tienen al menos un puerto USB-C en estos días, pero los más antiguos solo pueden tener USB-A. Puede usar adaptadores si es necesario.
* potencia: Algunos discos duros externos requieren su propia fuente de alimentación (un ladrillo de potencia separado). Otros tienen alimentos en autobús, lo que significa que obtienen energía del puerto USB. Si una unidad con alimentación de autobuses no tiene suficiente energía del puerto USB de su Mac (esto es más común con los puertos USB 2.0 más antiguos o las unidades de mayor capacidad), es posible que no funcione correctamente.
* Problemas de controlador (raro): Si bien es raro, podría haber problemas de compatibilidad del conductor muy específicos con ciertos discos duros extremadamente nicho. Sin embargo, esto es poco probable.
En resumen:una * mayoría * de discos duros USB funcionará con una Mac "fuera de la caja", pero tenga en cuenta la compatibilidad del sistema de archivos y potencialmente necesita un adaptador o potencia adicional. Si tiene problemas, reformatear el impulso a Exfat o APFS a menudo es una solución, aunque esto borrará todos los datos en la unidad.