* computadoras: Este es el lugar más común. Esto incluye escritorios, computadoras portátiles y servidores. Requieren una CPU, RAM, almacenamiento (disco duro, SSD o NVME) y una placa base.
* teléfonos inteligentes y tabletas: Estos dispositivos móviles ejecutan sistemas operativos especializados como Android e iOS. Requieren un procesador móvil, RAM, almacenamiento y una pantalla táctil.
* Sistemas integrados: Estos son sistemas con un propósito dedicado, como los que se encuentran en automóviles, electrodomésticos y equipos industriales. El hardware varía mucho según la aplicación, pero generalmente incluye un microcontrolador o microprocesador, RAM y almacenamiento mínimo.
* máquinas virtuales (VMS): Se puede instalar un sistema operativo dentro de un entorno virtual además de un sistema operativo host. Esto requiere recursos suficientes (CPU, RAM, almacenamiento) en la máquina host.
* Consolas de juegos: Estas máquinas de juego dedicadas también ejecutan sistemas operativos especializados, optimizados para el rendimiento del juego.
En esencia, en cualquier lugar donde esté presente una unidad de procesamiento suficiente, memoria y almacenamiento para ejecutar las funciones centrales del sistema operativo, se puede instalar (teóricamente) un sistema operativo, aunque los detalles de la instalación y la funcionalidad del sistema operativo variarán en gran medida dependiendo del hardware de destino.