* Fundación para proveedores de nubes: Muchos proveedores de nube populares como Amazon Web Services (AWS), Google Cloud Platform (GCP) y Microsoft Azure se basan en Linux. Esto se debe a que Linux es de código abierto, estable y altamente personalizable, lo que lo hace ideal para ejecutar infraestructura a gran escala.
* Open Source Solutions: Hay muchas soluciones en la nube de código abierto construidas en Linux, como OpenStack y CloudStack. Estas soluciones permiten a las organizaciones construir y administrar sus propias nubes privadas.
* Virtualización: Linux se destaca en la virtualización, que es clave para la computación en la nube. La virtualización permite que múltiples sistemas operativos y aplicaciones se ejecuten en un solo servidor físico, haciendo un uso eficiente de los recursos y habilitando la escalabilidad.
* contenedores: Linux también está en el núcleo de tecnologías de contenedores como Docker y Kubernetes, que permiten una implementación eficiente y gestión de aplicaciones en la nube.
En resumen: Linux no ofrece directamente la computación en la nube de la misma manera que lo hacen AWS o Azure. Sin embargo, es una tecnología subyacente crucial que permite el desarrollo y operación de plataformas y servicios en la nube.