Porting de software:
Esto implica adaptar el software para ejecutarse en un sistema operativo diferente, arquitectura de hardware (por ejemplo, x86 a brazo), o incluso un lenguaje de programación diferente. El proceso puede variar de trivial a extremadamente complejo, dependiendo de las diferencias entre los entornos de origen y objetivo.
Aspectos clave de la portada de software:
* Identificación de diferencias: Este es el primer paso crucial. Debe determinar las incompatibilidades específicas entre los entornos de origen y de destino. Esto podría incluir:
* API del sistema operativo: Diferentes sistemas operativos tienen diferentes formas de hacer las cosas (por ejemplo, E/S de archivo, redes, gestión de ventanas).
* API de hardware: Acceso a hardware (tarjeta gráfica, tarjeta de sonido, etc.) difiere significativamente entre las arquitecturas.
* Bibliotecas: El software puede confiar en bibliotecas que no están disponibles en el sistema de destino.
* Diferencias del compilador: Los compiladores pueden interpretar el código de manera ligeramente diferente, lo que lleva a errores sutiles.
* Formatos de datos: Los datos pueden almacenarse en diferentes formatos en diferentes sistemas.
* Codificaciones de caracteres: Los problemas de codificación de texto pueden causar problemas.
* Modificación del código: Una vez que se identifican las diferencias, el código debe cambiarse para abordar ellas. Esto puede involucrar:
* Reemplazo de llamadas específicas de OS/hardware: Cambiar a alternativas independientes de la plataforma o escribir envoltorios de código específicos de la plataforma.
* Uso de diferentes bibliotecas: Encontrar bibliotecas equivalentes o transferir las bibliotecas requeridas al sistema de destino.
* Reescribir partes del código: En casos extremos, las secciones completas de código pueden necesitar reescribir para trabajar en la nueva plataforma.
* Compilación condicional: Uso de las directivas preprocesador (`#ifdef`,`#ifndef`) para incluir o excluir bloques de código basados en la plataforma de destino.
* Prueba y depuración: Las pruebas rigurosas son esenciales para garantizar que el software portado funcione de manera correcta y confiable en el sistema de destino. Esto podría involucrar:
* Prueba unitaria: Prueba de componentes individuales del software.
* Prueba de integración: Prueba de cómo funcionan los diferentes componentes juntos.
* Prueba del sistema: Prueba de todo el sistema de software en la plataforma de destino.
Porting de hardware:
Generalmente se trata de adaptar los diseños o circuitos de hardware a un proceso de fabricación, embalaje o funcionalidad de fabricación diferente. Por ejemplo, portar un circuito diseñado para un FPGA específico (matriz de compuerta programable de campo) a otro FPGA con diferentes capacidades.
Aspectos clave de la portada de hardware:
* Revisión esquemática: Es necesaria una revisión exhaustiva del diseño de hardware para identificar cualquier incompatibilidad con la tecnología objetivo.
* Selección de componentes: Reemplazo de componentes que no están disponibles o no están adecuados para la plataforma de destino con piezas equivalentes.
* Cambios de diseño: Ajuste del diseño físico del circuito para cumplir con las restricciones de la nueva plataforma (por ejemplo, diferentes tamaño de la placa, empaquetado diferente).
* Verificación y prueba: Las pruebas extensas son cruciales para garantizar que las funciones de hardware portadas correctamente.
En resumen: La portada implica un análisis detallado de las diferencias entre los entornos de origen y objetivo, seguido de modificaciones de código o diseño, y pruebas rigurosas. La complejidad y el esfuerzo involucrados varían mucho según la situación específica.