1. Cambie el nombre de usuario y la contraseña predeterminados: El nombre de usuario y la contraseña predeterminados para su enrutador son ampliamente conocidos, lo que facilita a los hackers obtener acceso. Cambiar estas credenciales a una combinación fuerte y única es crucial para la seguridad.
2. Deshabilite el SSID predeterminado (nombre de la red): La mayoría de los enrutadores transmiten su nombre de red (SSID) de forma predeterminada. Esto hace que su red sea fácil de descubrir por cualquier persona dentro del alcance. Deshabilitar el SSID predeterminado y configurar uno único ayuda a mantener su red oculta y segura.
3. Habilitar el cifrado WPA2/WPA3: Este es el protocolo de seguridad inalámbrico más fuerte disponible. Cifra los datos transmitidos entre sus dispositivos y el enrutador, evitando el acceso no autorizado. Asegúrese de habilitar WPA2/WPA3 y establecer una contraseña segura para su red.
bono: Muchos enrutadores también vienen con reglas predeterminadas de reenvío de puertos que pueden crear vulnerabilidades de seguridad. Debe revisar y ajustar estas configuraciones para asegurarse de que solo los puertos necesarios estén abiertos.
Al realizar estos cambios, mejorará significativamente la seguridad de su red doméstica y protegerá sus datos confidenciales.