* Orientado a la conexión: Los datos se intercambian a través de una conexión virtual dedicada entre dos entidades. Esta conexión se establece antes de que comience cualquier transferencia de datos, asegurando una ruta confiable para la comunicación.
* reconocido: El receptor reconoce cada paquete de datos transmitido a través de la conexión. Esto asegura que los datos no se pierdan o corrompan durante el tránsito. Si se pierde o corrompe un paquete, el remitente lo retransmisa hasta que se recibe con éxito.
Aquí hay un desglose de las características clave:
Establecimiento de conexión:
* Antes de que comience la comunicación, se establece una conexión entre el remitente y el receptor.
* Esto implica un proceso de apretón de manos, donde ambas partes acuerdan los parámetros de comunicación.
* La conexión proporciona una ruta dedicada para que los datos fluyan entre ellos.
Transmisión de datos:
* Los datos se envían como una serie de paquetes sobre la conexión establecida.
* El receptor reconoce cada paquete para confirmar su recibo.
* Este mecanismo de reconocimiento garantiza la integridad y confiabilidad de los datos.
Detección y retransmisión de pérdidas:
* Si un paquete se pierde o corrompe durante la transmisión, el receptor no envía un reconocimiento.
* El remitente se desprende esperando el reconocimiento y se reúne el paquete perdido.
* Este proceso continúa hasta que el paquete se recibe con éxito.
Ventajas:
* Fiabilidad: Asegura que los datos lleguen al destino con precisión y sin pérdida.
* Entrega ordenada: Los paquetes de datos llegan al orden en que fueron enviados.
* Control de flujo: Evita que el remitente abrume el receptor con datos.
Desventajas:
* Overhead: El proceso de reconocimiento agrega gastos generales a la comunicación.
* Tiempo de configuración de conexión: Establecer una conexión puede llevar tiempo.
* Consumo de recursos: Mantener una conexión requiere recursos, lo que puede ser una preocupación para aplicaciones de alto volumen.
Ejemplos:
* TCP (Protocolo de control de transmisión): Un ejemplo común de un protocolo reconocido orientado a la conexión utilizado para la comunicación por Internet.
* Secure Shell (SSH): Un protocolo seguro para el inicio de sesión remoto y la transferencia de archivos, también utiliza TCP para la transmisión de datos.
* redes privadas virtuales (VPN): Las VPN a menudo emplean protocolos orientados a la conexión reconocidos para conectarse de forma segura a una red remota.
Por el contrario, los servicios sin conexión (como UDP) no requieren una conexión dedicada y reconocimientos, sacrificando la confiabilidad por la velocidad. La elección entre servicios orientados a la conexión y sin conexión depende de los requisitos de aplicación específicos y el saldo entre velocidad y confiabilidad.