Las características clave y las funcionalidades de un controlador DHCP incluyen:
* Gestión centralizada: Administre y configure múltiples servidores DHCP desde una sola consola. Esto simplifica la administración, especialmente en grandes redes con muchos servidores.
* Gestión basada en políticas: Defina las políticas para la asignación de direcciones IP, los tiempos de arrendamiento, las opciones y otras configuraciones de DHCP. Esto garantiza la consistencia y el control en toda la red.
* Alta disponibilidad y redundancia: Implemente mecanismos de conmutación por error para garantizar el servicio DHCP continuo, incluso si uno o más servidores fallan. Esto mantiene el tiempo de actividad de la red.
* escalabilidad: Agregue o elimine fácilmente los servidores DHCP según sea necesario para acomodar los crecientes requisitos de la red.
* Informes y monitoreo: Proporciona informes detallados sobre la actividad de DHCP, incluida la asignación de direcciones, el uso del arrendamiento y el estado del servidor. Esto ayuda con la resolución de problemas y la planificación de la capacidad.
* Integración con otros sistemas de gestión de redes: A menudo se integra con otras herramientas de gestión de redes, lo que permite la gestión unificada de toda la infraestructura de la red.
* Mejoras de seguridad: Implemente características como el control de acceso basado en roles, lo que permite el control granular sobre quién puede administrar la configuración de DHCP. Esto mejora la seguridad.
Ejemplos de implementaciones del controlador DHCP incluyen características dentro de sistemas de gestión de redes como Cisco Prime Infrastructure, SolarWinds Network Performance Monitor y soluciones dedicadas de software DHCP Management. Algunos proveedores de nubes a gran escala también ofrecen servicios DHCP administrados que funcionan de manera similar a un controlador DHCP.