La historia cuenta que Larry Page y Sergey Brin, los fundadores de Google, estaban buscando un nombre para su motor de búsqueda que reflejara la gran cantidad de información a la que podría acceder. Se encontraron con el término "Googol" en un libro y les gustó su asociación con la inmensidad y la capacidad de manejar grandes cantidades. También pensaron que era un nombre divertido y memorable.
Originalmente escribieron mal la palabra como "Google" en sus primeros borradores, y se atascó.