1. Optimice su conexión a Internet:
* Conexión cableada: Use un cable Ethernet en lugar de Wi-Fi. Las conexiones con cable son generalmente mucho más estables y más rápidas que la inalámbrica.
* Verifique la interferencia: Si usa Wi-Fi, asegúrese de que no haya muchos dispositivos compitiendo por el ancho de banda o fuentes de interferencia (microondas, teléfonos inalámbricos).
* Pruebe su velocidad de Internet: Ejecute una prueba de velocidad (muchas herramientas en línea gratuitas disponibles) para ver si su velocidad de Internet es más lenta de lo esperado. Póngase en contacto con su ISP si hay problemas.
* Cerrar programas innecesarios: Las aplicaciones intensivas en ancho de banda (transmisión, descargas) pueden competir con la actualización. Cerralos mientras se actualiza.
2. Prepare su sistema:
* espacio de disco suficiente: Asegúrese de tener suficiente espacio libre en su disco duro o SSD. Las actualizaciones a menudo requieren archivos temporales, y el espacio insuficiente puede retrasar el proceso significativamente.
* Reinicie su computadora: Antes de comenzar la actualización, reinicie su computadora para borrar los procesos de ejecución que puedan interferir.
* Desactivar antivirus temporalmente (¡precaución!): Si bien no se recomienda, a menos que sea absolutamente necesario, deshabilitar temporalmente su antivirus * podría * mejorar ligeramente las velocidades. Vuelva a habilitarlo inmediatamente después de la actualización. Esto es arriesgado, así que solo haga esto si confía completamente en sus fuentes.
* Gestión de energía: Asegúrese de que su computadora no esté configurada para dormir o modos de baja potencia durante la actualización.
3. Actualización durante las horas de menor actividad:
* menos congestión de la red: Actualización durante la noche o en momentos en que su red está menos congestionada (evite las horas de uso máximo). Esto es especialmente útil si comparte su conexión a Internet.
4. Optimizaciones específicas del sistema:
* SSD vs. HDD: Las unidades de estado sólido (SSD) son mucho más rápidos que las unidades de disco duro tradicionales (HDDS). Si está utilizando un HDD, actualizar a un SSD mejorará drásticamente los tiempos de actualización (y el rendimiento general del sistema).
* Procesos de fondo: Algunos sistemas le permiten deshabilitar temporalmente los procesos o servicios de fondo durante las actualizaciones. Consulte la documentación de su sistema para obtener instrucciones, ya que esto no siempre es sencillo y podría conducir a la inestabilidad si se realiza incorrectamente.
5. Elija el método de actualización correcto (si corresponde):
* unidad USB o almacenamiento externo: Algunos sistemas le permiten descargar la actualización a una unidad externa y luego instalarla. Esto puede ser más rápido si su conexión a Internet es lenta pero tiene una unidad externa rápida.
Nota importante: Si bien estos consejos pueden mejorar las velocidades de actualización, el factor principal que determina el tiempo de actualización es el tamaño y la complejidad de la actualización. Las grandes actualizaciones simplemente tardan más, independientemente de la optimización de su sistema. Sea paciente y deje que el proceso se complete sin interrupción. La interrupción de una actualización puede corromper su sistema.