* bucle de retroalimentación: Las señales de línea a menudo son mucho más fuertes de lo que la línea espera. Conectarlos directamente crea un circuito de retroalimentación, lo que resulta en un fuerte chillido de agudas o incluso daño a su tarjeta de sonido o altavoces. Esto se debe a que la señal de salida se amplifica y se vuelve a alimentar a la entrada, causando un ciclo continuo de amplificación.
* Recorte y distorsión: La línea probablemente se sobrecarga, causando un recorte (una dura distorsión de la señal de audio). Esto puede sonar desagradable y, en casos extremos, podría dañar su equipo de audio.
* Daño del componente: En casos raros, esto podría dañar los componentes de la tarjeta de sonido debido a la abrumadora señal de entrada.
Si bien algunas interfaces de audio muy especializadas pueden tener características que permiten este tipo de conexión en circunstancias controladas (por ejemplo, para el monitoreo), no se recomienda absolutamente para tarjetas de sonido estándar. Si necesita grabar lo que sale de su tarjeta de sonido, debe considerar usar:
* Software de grabación de audio con un dispositivo de bucleback virtual: Esta es una solución basada en software que crea un cable de audio virtual para enrutar la salida a la entrada sin una conexión física.
* Un mezclador de audio adecuado: Los mezcladores tienen controles para administrar los niveles de entrada y salida de manera adecuada y evitar retroalimentación.
En resumen, evite la línea directa a las conexiones de línea a menos que tenga mucha experiencia con la ingeniería de audio y tenga el equipo correcto.