* solicitudes por segundo (RPS): Esto mide cuántas solicitudes HTTP puede procesar el servidor en un solo segundo. Las RP altas indican una buena capacidad para manejar muchos usuarios concurrentes.
* ancho de banda: La cantidad de datos (en bits por segundo o BPS) el servidor puede transferir. El alto ancho de banda es crucial para servir archivos grandes, imágenes y videos rápidamente. Esto a menudo se mide en el nivel de red que conecta el servidor a Internet, pero también dentro del propio servidor (por ejemplo, velocidad de E/S de disco).
* Usuarios concurrentes: El número de usuarios que pueden acceder simultáneamente al sitio web sin problemas de rendimiento. Esto está relacionado con RPS, pero también depende de la complejidad de las solicitudes y los recursos del servidor.
* CPU y memoria: La potencia de procesamiento (CPU) y la RAM (memoria) disponible afectan directamente la rapidez con que el servidor puede procesar las solicitudes. Los recursos insuficientes conducen a desaceleraciones y se bloquean potencialmente.
* Capacidad de almacenamiento: La cantidad de espacio en disco disponible para almacenar archivos del sitio web, bases de datos y registros. No estar en almacenamiento puede llevar al tiempo de inactividad del sitio web.
* Capacidad de la base de datos: Si el sitio web utiliza una base de datos (como MySQL o PostgreSQL), su capacidad para manejar consultas y transacciones es crucial. Una base de datos lenta o sobrecargada afecta significativamente el rendimiento general del sitio web.
* Rendimiento de la aplicación: La eficiencia del código del sitio web y cómo interactúa con los recursos del servidor. El código ineficiente puede consumir más recursos de los necesarios, reduciendo la capacidad.
Es importante comprender que estos factores están interconectados. Por ejemplo, el alto ancho de banda es inútil si la CPU no puede procesar las solicitudes lo suficientemente rápido. La capacidad de un sitio web es, en última instancia, el cuello de botella creado por el factor limitante entre estos recursos.
Medir y administrar la capacidad del servidor web requiere herramientas y técnicas de monitoreo para rastrear las métricas de rendimiento e identificar posibles cuellos de botella. La capacidad de escala a menudo implica agregar más servidores (escala horizontal) o actualizar el hardware del servidor (escala vertical).