Mientras que el término "ROM" (memoria de solo lectura) todavía se usa, las placas base modernas generalmente usan memoria flash en lugar de ROM verdadera. Esta memoria flash * puede * ser reprogramada, pero generalmente se realiza a través de un proceso administrado por la utilidad de actualización de firmware de la placa base (a menudo proporcionada por el fabricante). Esta utilidad generalmente implica descargar un nuevo archivo BIOS del sitio web del fabricante y flashearlo a través de la utilidad. Manipular directamente el chip de flash generalmente no es posible y puede ladrar fácilmente la placa base.
Diferencias clave que evitan la reprogramación directa:
* Mecanismos de protección: Los chips modernos del BIOS a menudo tienen mecanismos de protección para evitar la reprogramación no autorizada. Esto es para evitar daños accidentales y vulnerabilidades de seguridad.
* Equipo especializado: La reprogramación directamente requeriría equipos especializados (programadores) y experiencia para manejar los protocolos de programación de bajo nivel del chip.
* Integridad de datos: Informar incorrectamente el BIOS puede conducir a una placa base permanentemente inutilizable.
En resumen, mientras que la memoria subyacente es programable, el proceso está estrictamente controlado por las herramientas proporcionadas por el fabricante y no está destinada a la manipulación directa del usuario. Intentar hacerlo sin el conocimiento y el equipo adecuados es altamente arriesgado.