El procesador
(CPU) en sí controla la transferencia de datos entre RAM y sí misma. Más específicamente, la unidad de gestión de memoria de la CPU (MMU) y los circuitos de control asociados manejan el direccionamiento, el tiempo y la transferencia de datos. La CPU solicita datos de direcciones de memoria específicas, y la MMU traduce esas direcciones y coordina la transferencia con el controlador RAM.